
María de los Ángeles Herrera, diputada local, dijo que no basta con difundir o promover los derechos, sino más bien, es urgente emprender acciones bajo una cultura de respeto y poder llevarla a la practica.
Los abusos que en ocasiones cometen las autoridades policiacas o militares en contra del ciudadano, o cualquier otro funcionario, también son reprobables, ya que ningún cargo público autoriza a dar tratos inapropiados a los ciudadanos, como en muchas ocasiones resultan los operativos aplicados para combatir la inseguridad.
“la violación de los derechos humanos, incluyendo actos de tortura o detención arbitraria, bajo ningún concepto pueden ser estimados como actos de servicio en cumplimiento de una misión, orden, deber, funciones operativas o administrativas de las fuerzas armadas”, dijo la perredista