Duele decir esta frase, pero al ver la triste imagen de morenistas de Nuevo León entregándose a una imposición PRI-PAN partidista, no tengo otra cosa en mente.
Año 2000, año electoral presidencial. México está ampliamente decepcionado de tantos años del mismo partido hegemónico, el PRI. El candidato de la izquierda Ing. Cuauhtémoc Cárdenas, al frente del PRD llega desgastado. Muchos intelectuales y gente de izquierda llaman a votar contra el PRI y surge el movimiento del “voto útil”.
Para vencer al PRI, llaman a votar por el PAN. Algunos expertos estiman que este llamado le produjo cerca de 6 millones de votos al candidato del PAN, Vicente Fox. Al poco tiempo, con tantos desaciertos del “gobierno de la alternancia”, los que otorgaron su voto útil, se dieron cuenta de que fue un “voto inútil”. Salió a la luz el contubernio y negociaciones entre PRI y PAN.
Había que hacer todo con tal de que la izquierda no llegara al poder, siguiendo los lineamientos de los empresarios de derecha y de la cúpula católica, siempre conservadora y contra el pueblo de México. El PRI siguió apoyando al PAN, para nuevamente ganar las elecciones, que han quedado con una gran duda por el fraude contra el candidato de la izquierda AMLO.
Año 2021, elecciones intermedias, 15 gubernaturas, Cámara de Diputados Federal y muchos gobiernos municipales y congresos locales. A diferencia del 2018 donde ganó AMLO con 53.19% de los votos y ganando en todos los estados excepto Guanajuato.
Con respecto aA nivel de distritos electorales federales, AMLO arrasó en todo el país, ganando 278 de 300. Es decir, no ganó en 22 distritos, principalmente en el Estado de Guanajuato y N.L.
Es precisamente en el estado de NL donde Morena no ha logrado posicionarse. Probablemente a las múltiples guerras intestinas.
En 2018 se dio el voto cruzado gracias al efecto AMLO en las boletas. Muchos ciudadanos votaron por AMLO para la presidencia, pero votaron por otros partidos para las presidencias municipales o diputados. Así lo demuestran los resultados en este estado: para presidente AMLO ganó con solo 34.33% contra 32.30% de R. Anaya y 14.47% de Meade. AMLO, está muy por debajo del 53.19% nacional. Casi 20% menos.
En cuanto a presidencias municipales Morena y aliados solo ganaron 3 de 51. Muy por debajo de la media nacional. Y del Congreso Local, de 42 diputados Morena solo obtuvo 8 de 42. Y con las renuncias que han tenido, se convirtió de la segunda fuerza a tercera fuerza en dicho congreso.
En estas circunstancias llegamos a las elecciones de este año 2021. Aunado a un descontento del PT, quien tradicionalmente es el partido que más votos aporta a la coalición.
Los oportunistas morenistas buscan desesperadamente pre-candidatos que les aporten votos. No importa su trayectoria nefasta en otros partidos como el pan y que solo para disimular renunciaron muy recientemente, pero aún conservan relación muy cercana con las cúpulas del poder en dichos partidos. Usan argucias de que es orden de muy arriba (sic), pero es su desesperación por agarrar un puesto ahora que el “efecto AMLO” en las boletas estará ausente en las boletas de este año 2021. Llaman a un “voto útil” por, o apoyar a, estos precandidatos.
El pueblo que no conoce su historia está condenado a cometer los mismos errores y horrores históricos.
Fuente de resultados electorales: INE. Resultados del cómputo de la elección presidencial 2018.